Si, así es, llevo 100 entradas de un no-diario. Pensando en el todo de la nada me he parado a ver esos sitios que ya tenía un poco abandonados, y me he dado cuenta, de que el tiempo pasa, nada sigue en su sitio, pero yo me sigo sintiendo igual. Igual de perdida, de asustada y de jodida. Tengo ganas, muchas ganas de que ya llegue el día 30, y de irme de esta ciudad, perderme por un lugar conocido, asustarme de la noches sin luna y de joderme solo con los pinchos de los arbustos. Quiero montaña, aire fresco, noches sin luz, quiero todas las cosas que ese sitio me da. Se que me las dará. Aunque un año más me llevo ese sabor amargo, de no saber qué pasará a la vuelta, de qué pasará mientras esté allí. Otro año más así, y ya van casi 4. ¿Qué habrá este año de diferente?
100. 100 millones de entradas habrían si contara cada pensamiento, sentimiendo, que pasaran por mi cabeza.
100. 100 millones de entradas habrían si contara cada pensamiento, sentimiendo, que pasaran por mi cabeza.
